En el año 1877 Thomas Alva Edison inventó el fonógrafo, una de las invenciones más importantes de todo el siglo XIX. La intención de este aparato era grabar y reproducir sonido, dando así la oportunidad a todo el mundo de poder acceder a la música, algo que en aquél tiempo estaba reservada solamente a la gente que pertenecía a la clase alta.
Un fonógrafo es un aparato bastante parecido a un reproductor de discos compactos, solamente que los discos están hechos con cera en lugar de con aluminio y plástico, y en lugar de usar un rayo láser, se utilizaba una aguja para poder leer el sonido.
El fonógrafo
La primera grabación que Thomas Alva Edison realizó tiene varias versiones. Una dice que fue a sí mismo y otras que a uno de sus asistentes. Llevó a cabo dicha grabación en una tira de papel metálico que se enrollaba en un cilindro que iba girando.
Aunque Edison está considerado como el inventor de este aparato, lo cierto es que dos franceses, conocidos como Charles Cros y Leon Scott, fueron los que desarrollaron las máquinas precursoras del invento de Edison. El primer fonógrafo se parecía bastante poco a todos aquellos que rápidamente le iban a seguir, ya que se trataba de un altavoz muy rudimentario.
Hay que decir también que después de inventarlo, Edison perdió el interés por un tiempo por el fonógrafo, pero no así Alexandre Granhan Bell, inventor a su vez del teléfono, ni tampoco su aprendiz Sumner Tainter.
Entre los dos decidieron realizar algunas mejoras a este dispositivo desarrollando una manera mejor de crear grabaciones. Para ello utilizando cera a la hora de cubrir el cilindro, en lugar de papel metálico. Ellos llamaron a este dispositivo grafófono.
El propósito original
Como ya hemos comentado, este aparato se creó con la intención de poder hacer llegar a todo el mundo el sonido, pero ni Bell ni Edison vieron que llegara a las masas para poder entretenerlas.
En 1890 tanto el fonógrafo como el grafófono se promocionaban para ser utilizado en oficinas como aparatos de dictado, pero en ningún caso hacían mucho dinero. En cualquier caso también se empezaron a usar para el entretenimiento y podían verse en parques de diversión donde funcionaban con monedas.
No fue hasta el año 1901 cuando una famosa empresa conocida como Victor Talking Machine Company, empezó a distribuir fonógrafos consiguiendo un gran éxito. En ese momento los fonógrafos comenzaron a conocerse como Victrolas y llegaron a marcar el comienzo de la industria de la música hasta llegar a nuestros días.
Curiosidades
Cien años después de que Edison inventara su fonógrafo, la NASA pensó que si a los humanos nos gusta la música tanto, puede que a los extraterrestres también. Por esa razón se adjuntaron en los transbordadores Voyager 1 y 2, encargados de explorar el espacio interestelar y los planetas, dos discos de oro de doce pulgadas. ¡Lo que no sabemos es si a los alienígenas les gustó la música que les enviaron!